Micropoesía ¿el tamaño importa?

¿Importa o no? ¿Sois del sí o del no? Después de pensarlo mucho decidí hacer pequeño experimento con las encuestas de Instagram stories… ¡Y el pueblo habló!… un 63% de mis contactos respondieron que sí mientras que el ‘no’ se llevó un 37%.

Desde mi punto de vista el tamaño no importa* pero con una condición indispensable. No importa si la calidad es buena. Y si hablamos de tamaño reducido con mucha calidad, hablamos de los micropoemas de Maria José Martín (más conocida como AJO).

Conocí su poesía por casualidad, como suele pasar con las mejores cosas, curioseando en una librería. Me llamó la atención tanto el nombre ‘AJO’ como el formato del libro (pequeñito) y la representación graffitera de ‘La maja desnuda’ de Goya. Una vez empecé a leer los micropoemas en el interior ya no lo pude dejar. Me preguntaba cómo era posible tanta verdad y genialidad en un par de versos, en 15-20 palabras, ¿¿¿Cómoooo??? – gritaba mi cerebro.

Micropoetisa, cantante, compositora y agitadora

AJO es el nombre poético-profesional que Maria José eligió para dar nombre a sus creaciones. Ella misma se denomina como micropoetisa, cantante, compositora y agitadora. En los últimos años ha publicado 4 libros de micropoemas y, con ellos, ha realizado multitud de espectáculos en directo. AJO empezó siendo fundadora del grupo de rock experimental Mil Dolores Pequeños. Fue cuando dejó el grupo que decidió dedicarse a la micropoesia, según ella misma ‘me dije ¿qué voy a hacer? pues me hago micropoetisa que vi que no había mucho mercado’.

Los recitales de AJO no son como los recitales de poesía convencionales que tenemos en mente. Son más bien un show experimental donde mezcla artistas musicales como Julieta Venegas, músicos de percusión y ella misma recitando como si de una obra de teatro se tratara. Todas las actuaciones tienen algo en común: cada una es diferente y susceptible a la improvisación.

“Bello público”

Como ella misma dice ha hecho de todo y “Todo lo que hago es para que me quede una biografía chula”. También ha explorado el terreno de la fotografía. A lo largo de 10 años, mientras estuvo trabajando como taquillera en el Teatro Alfil el Madrid, se dedicó a recopilar fotos de  los asistentes al teatro. Así fue como nació “Bello público”, que reúne  208 fotografías tomadas en un libro que nos muestra de una forma diferente el paisaje cultural de una ciudad.

Si os habéis quedado con ganas de más AJO, aquí tenéis en pdf su segundo libro de micropoesía, Micropoemas 2. O bien podéis seguirla en Twitter o Facebook.

¡Nos vemos!